que solo aderezan
con respuestas de vaguezas
para así, saciarse.
engaños y sutilezas
que se tragan glotonamente
sin pestañear ni mover la cabeza,
porque asi, viven felices.
Sin duda todo con un sabor dulce,
pero no menos falso y estridente
a ojos de la verdad y de los jueces.
Jack.